Un refugio de naturaleza y tradición A la orilla de la carretera hacia Tela, en la pintoresca Aldea El Aguacate, se encuentra una joya escondida: una majestuosa hacienda de 12.5 manzanas que combina la belleza del campo con el confort de una propiedad bien equipada. Aquí, el tiempo parece detenerse, permitiendo disfrutar de la tranquilidad de la vida rural sin renunciar a la comodidad. En el corazón de la hacienda se alza una acogedora casa de tres habitaciones, con una cálida sala y una cocina lista para preparar recetas tradicionales. Pero lo que realmente hace especial a esta propiedad es su potencial y sus amplias instalaciones: caballerizas, gallineros, porquerizas y un extenso potrero, ideales para la crianza de animales y la producción agropecuaria. El agua nunca será un problema gracias a un tanque de almacenamiento, y la energía está garantizada con una planta eléctrica que asegura el funcionamiento de la propiedad en todo momento. Para los amantes de la fauna, la hacienda cuenta con un hábitat especial para guacamayas y cómodas perreras para el resguardo de mascotas o perros de trabajo. Y como toda hacienda con historia y tradición, no podía faltar un quiosco y un horno tradicional, perfectos para reuniones familiares y celebraciones al aire libre. Esta hacienda es mucho más que un terreno; es un sueño de autosuficiencia, un paraíso para los amantes del campo y una oportunidad única para quienes buscan un espacio con identidad, historia y un sinfín de posibilidades.